Tu

jueves, 12 de diciembre de 2013

Es de noche. Todo está en silencio. Sobre nosotros un manto de estrellas brilla titileante. Hace frío, pero nosotros no lo notamos. Tumbados en el suelo contemplamos las estrellas que nos cubren. Es una noche sin luna. Te miro. Tu cabeza apoyada en mi pecho sube y baja al ritmo de mi respiración. Te doy un beso en la frente y te arropo con la mata roja que nos cubre mientras huelo tu cabello. Me rodeas con las piernas y me abrazas fuerte. Quisiera que  este momento no acabase nunca. Quisiera que fuese eterno, que el tiempo se detuviese en este instante, y tenerte abrazada para siempre. A veces, y solo aveces, infinito es demasiado poco.

1 comentario:

  1. Escribes muy bien y deberías escribir más cosas como estas ;)

    ResponderEliminar