Sucédeme otra vez.
Sucédeme otra vez.
Sucédeme ahora que todo está en calma.
Sucédeme al oído susurrándome que estás de vuelta.
Sucédeme en estos días en los que necesito tu presencia,
porque ahora recuerdo lo bien que me hacía hablar contigo.
Sucédeme de nuevo,
para dar significado a ese " no éramos nada, pero había algo"
Sucédeme, porque incertidumbre se apodera de cada uno de mis sentimientos
en los que ya no sé ni en qué pensar.
Sucédeme, pero hazlo en persona,
porque ya hasta el sueño me quitas, de no saber de ti.
La niña cuadriculada.
Esta vez no me ha convencido demasiado el poema. me ha gustado la esencia, el tema que trata y tal, lo único que no me convence es la palabra "sucédeme", más que nada porque, como mínimo por aquí, no la usamos nunca y se me ha hecho extraña, demasiado larga.
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